El marketing tradicional intenta vender de manera directa, pero en el educativo esta idea pasa a un segundo plano y el énfasis humano toma prioridad.
El marketing educativo es aquel en el que se plantea una estrategia de mercado, la cual busca promocionar una institución educativa sin ser evidente.
Pilares
- Presencia en la web: Es necesario que la institución aparezca online, puesto que sus futuros estudiantes están explorando en el mundo de Internet.
- Visibilidad para el marketing educativo: Realiza un SEO óptimo que te permita aparecer en las búsquedas de Google u otros buscadores.
- Segmentación: Da información basada en los intereses de los usuarios, cada uno tiene sus propios intereses.
- Atracción y captación: “Articular una estrategia de inbound marketing (el usuario encuentra la empresa) basada en contenidos segmentados”, según el portal Tesubi.
- Transparencia: Debemos mostrar lo que hacemos y cómo lo hacemos, creando una mentalidad de confianza con el cliente.
¿Cómo se promociona este tipo de entes?
- Cuidar la imagen y reputación, para que éstas atraigan a nuevos clientes.
- Incluir servicios extra en tu oferta educativa.
- Incluir en la oferta el material didáctico impreso o digital.
- Diferenciar la oferta educativa.
Estrategias de plaza
Las siguientes son acciones dirigidas a resaltar ubicación o tácticas externas, según el portal web Smart up Marketing.
- Incluir en la publicidad un mapa de la ubicación de la institución.
- Mencionar todas las vías de acceso o medios de transporte disponibles para llegar a la institución.
La existencia del marketing en el ente educativo debe estar “sustentada en el ideal de potenciar el crecimiento de las personas a través de la transmisión de conocimiento, habilidades y actitudes”, afirma el portal.